Madrid celebró ayer la tercera edición de la Vigilia “Enlázate por la Justicia”, un acto de oración convocado por las organizaciones católicas de cooperación –Cáritas, Justicia y Paz, Manos Unidas, Redes y CONFER– para pedir a las Administraciones Públicas y a toda la sociedad que no olviden a los excluidos del actual sistema económico –de la “cultura del descarte”, como decía el papa Francisco– y que actúen para caminar juntos hacia una nueva realidad donde haya espacio para la acogida de cada uno, especialmente de los más vulnerables.
No en vano, la Vigilia de este año se convocó bajo el lema “Caminos de esperanza” y se centró en la responsabilidad urgente que la comunidad cristiana y la sociedad en general tienen de acompañar a los más vulnerables, a los últimos, a los excluidos del actual sistema, a los que han quedado fuera de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, y que, si no se toman medidas, seguirán al margen de la agenda internacional de desarrollo después de 2015.
Más de 200 personas acudieron al acto celebrado en la Parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, “para enlazarse por la justicia y unirse a los más vulnerables en la construcción de un mundo nuevo, un reino de Dios”, como explicó Javier Goñi, presidente de la Fundación Proclade y la persona encargada de guiarnos a todos los asistentes a través de esos caminos simbólicos desde la injusticia y el sufrimiento hacia una nueva sociedad que acoja a todos sus miembros. “Caminamos todos juntos, como una sola familia humana, y Dios nos acompaña”, dijo Javier al tomar la palabra.
Ese peregrinaje lo recorrimos a través de la esperanza, la fe en Dios, la oración y los testimonios de personas “descartados” que nos llegaron desde todas los rincones de la tierra: África, América, Oriente Medio… Cada una de las cinco organizaciones convocantes recorrió un camino en nombre de aquellos que viven esas regiones de mundo y que no cuentan en el sistema que hemos construido y en los intereses que se están jugando.
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